La Condesa de Molins de Sant Pere Pescador
En Sant Pere Pescador, Teresa Molins, conocida como la Condesa de Molins, es todo un personaje de leyenda. Esta bandida utilizaba el título solo como nombre de guerra. Después de que Sant Pere Pescador cayera ante las tropas francesas durante la Guerra del Francés, se quedó sin nada y decidió convertirse en bandolera. Junto con su banda, la Condesa se dedicó a asaltar a ricos que viajaban por caminos reales y después repartía el botín entre los más pobres. Cansada de esta vida y de tantas aventuras, se recluyó en un convento durante un tiempo, pero la echaron por su mala reputación, así que decidió volver con los bandoleros al Castillo de Quermançó donde vivían. Después de tanto tiempo separados, la buena sintonía dio paso a las traiciones y un buen día, la Condesa decidió quemar el castillo y desaparecer.