Fiestas Mayores de Gracia en Barcelona

El mes de agosto, entre los días 15 y 21, se celebra una de las fiestas mayores más populares de Barcelona, la del barrio de Gracia. La Fiesta Mayor de Gracia hace más de 200 años que engalana el distrito, ya que se celebra desde 1817.

Aquel año se celebró un encuentro entre vecinos en la masía Can Trilla, en honor a la Virgen de Agosto. La fiesta se consolidó y durante la segunda década del siglo XIX adoptó un cariz más festivo y cívico que no religioso, con la inclusión de varias entidades y asociaciones del barrio.

Aunque se considera que las fiestas se celebran en honor a la Virgen de Agosto, también son un homenaje a san Roque. La devoción del barrio de Gracia por este santo viene de lejos, y muchos pensaban que podría convertirse en el patrón de las fiestas. Aunque no lo sea, durante las fiestas este santo tiene su propio pasacalle e incluso los castellers de Gracia realizan una ofrenda floral ante su capilla, situada en el barrio.

El principal atractivo de esta celebración, declarada Fiesta de Interés Nacional y reconocida con la Cruz de Sant Jordi, es el concurso de calles engalanadas por los propios vecinos. Un trabajo, pensado y organizado a lo largo de todo el año, que culmina con la entrega de premios a las tres mejores. Desde hace unos años, los balcones, las portaladas y los comercios también participan en un concurso y se engalanan para ofrecer todo un espectáculo de colores y creatividad.

La sostenibilidad y el reaprovechamiento están muy presentes en estas fiestas, ya que todos los materiales para decorar las calles son reciclados.

Además del concurso de calles, la festividad ofrece gran variedad de actividades para todos los públicos. Desde talleres infantiles y gincanas familiares, a charlas, pasando por visitas guiadas a lugares singulares como el refugio antiaéreo de la plaza de la Revolució. También se organizan cenas y comidas populares y como plato fuerte, las actuaciones musicales y los conciertos: hasta 200 en una semana. Los gigantes y cabezudos, los correfocs y los demonios de Gracia son los encargados de poner luz, color y fuego a la festividad.

En definitiva, las fiestas de Gracia son una reivindicación de la identidad popular del barrio, así como una muestra de la hermandad y cooperación entre sus vecinos.