Quinta etapa: la plana de Vic a vista de pájaro

Descubierta la ciudad desde tierra, es hora de contemplarla desde otra perspectiva. La siguiente prueba del Grand Tour sube a los concursantes, Sofía y Carles, a un globo aerostático para sobrevolar la comarca de Osona. Los rincones del casco antiguo de Vic ahora se ven desde el cielo, igual que los campos de cultivo, los bosques y las grandes montañas que rodean el valle y se avistan a lo lejos. ¿Preparad@ para surcar las nubes?

Una experiencia de vértigo

Las características geográficas de la plana de Vic la convierten en una de las mejores localizaciones de Cataluña para alzar el vuelo en globo aerostático. Desde las alturas se aprecia el entramado de callejuelas de Vic y algunos puntos de interés como la Plaça Major o la catedral. El viento te arrastra después hasta la llanura y, en un día claro, se ve el Prepirineo, Montserrat, el Pedraforca e incluso el mar.

Donde la plana se transforma en sierra

En este viaje por los aires, el paisaje cambia a medida que avanzas. Tras dejar la ciudad atrás, aparecen el Macizo de Les Guilleries y el espacio natural que le rodea. A los pies de la sierra verás un embalse alargado, el bello pantano de Sau, que bajo sus aguas guarda los restos del antiguo pueblo de Sant Romà de Sau. El embalse fue inaugurado en 1962 y cubrió la población, que aún asoma la cabeza cuando el nivel del agua es bajo y muestra su famoso campanario románico.

La ciudad cubierta de globos

Si alguna vez tienes la oportunidad de presenciar el Torneo Internacional de Globos del Mercat del Ram, no te lo pienses dos veces. El cielo se llena de colores y la ciudad de Vic se vuelve, si cabe, más bonita todavía. Se trata del festival de globos aerostáticos más antiguo del país, así que ya puede decirse que este evento es toda una tradición.

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